En el cuarto día de la Semana Bienal, el Teatro Bolívar dio lugar a tres conversatorios, cuyas intervenciones se basaron en proyectos de regeneración y reutilización de espacios para la creación de nuevos lugares.
MUSEUM OF ARTS AND DESIGN
La primera intervención estuvo a cargo de Brad Cloepfil que nos acompañó virtualmente desde Estados Unidos. Fundador de Allied Worlks un estudio de arquitectura y diseño con oficinas en Portland, Oregón, Brooklyn y Nueva York.
Su obra “Museum of Arts and Design”, un centro dedicado a la colección, preservación, estudio y exhibición de objetos contemporáneos hechos a mano, está ubicada en New York, inaugurada en 2008. El encargado de este proyecto fue Allied Works Architecture en colaboración con Handel Architects, con el fin de renovar el antiguo edificio diseñado por Edward Durell en 1963.
Durante su intervención Brad mencionó que: “El proyecto consistía en crear una nueva arquitectura en un edificio ya existente sin construir nada, sino, eliminando cosas de él”. De esta manera, se reconstruye y en el interior, se depura el espacio para poder crear visión con el espacio exterior, mientras que para su fachada se reconstruye el diseño y se implementan 22000 azulejos diseñados por Christine Jetten, los cuales tienen la particularidad de cambiar con la luz del día y el ángulo de visión, creando la sensación de ligereza.
En esta ocasión se contó con la moderación del arquitecto Adrián Moreno (Ecuador), que dio paso al crítico Nivaldo Vieira de Andrade Junior (Brasil), quien destacó que “este proyecto se relaciona directamente con la temática de la bienal debido a su conexión del interior y exterior con el paisaje”. Nivaldo continuó su intervención hablando acerca de la preservación y el reciclaje arquitectónico.
El crítico destacó que “no es posible conservar integralmente todos los edificios del pasado, el mejor proyecto es el que añade valor a las preexistencias y las convierte en edificaciones mejores a las anteriores”, como es el caso de Museum of Arts and Design que fortaleció las relaciones con el entorno y mejoró la calidad de la arquitectura.
Por otro lado, por parte de la delegación estudiantil de la Universidad Central del Ecuador, comentaron que el edificio realiza una significativa y admirable intervención en sus fachadas, y también, genera un sinuoso trabajo en el interior de la edificación la cual resulta en la optimización espacial y la creación de fisuras permeables con el exterior.
Finalmente, el conversatorio concluyó con el análisis de la Universidad de Mendoza, quienes se enfocaron en el estudio urbano y su relación con el edificio. Concluyeron su participación mencionando qué “Museum of Arts and Design responde adecuadamente a su entorno creando un diálogo con la morfología de la ciudad de Manhattan”.
PARQUE URBANO CUMANDÁ
Se presenta la obra de Luis López López, arquitecto por Universidad Central del Ecuador, quien como parte de su experticia profesional se ha dedicado al pensamiento y la práctica en el territorio y en el ámbito humano.
La obra analizada, Parque Urbano Cumandá, fue desarrollada en 2011, se enfocó en la regeneración y transformación del antiguo terminal terrestre de Quito, Ecuador, en un centro con nuevos espacios públicos direccionados al uso cultural y deportivo.
Luis López abrió el conversatorio con un breve resumen del contexto histórico del proyecto, destacando que su objetivo principal fue crear una red verde para la rehabilitación de las áreas naturales de la ciudad. Este proyecto se ha transformado en un espacio que promueve la cultura, el emprendimiento y la sostenibilidad, beneficiando a los barrios circundantes.
Este proyecto adapta una nueva cubierta, nuevos pasos peatonales y espacios a diferentes niveles para poder aprovechar la vista urbana que se puede obtener, además de proveer una conexión a los barrios contiguos que se encontraban previamente separados por la fuerte topografía y la antigua terminal.
Como parte del equipo de la Universidad de São Paulo, las estudiantes Camila Gabay y Luiza Ravanini participaron en el análisis del proyecto. Destacaron que a “pesar de estar ubicado en un terreno con desniveles topográficos que generan rupturas físicas y visuales, el arquitecto logró crear un espacio de conexión y encuentro para la comunidad”. Sin embargo, a partir del análisis y las charlas presentadas en la BAQ 2024, señalaron que aún no se ha logrado una apropiación efectiva de los espacios exteriores.
Por parte del Politécnico de Torino, los estudiantes Luca Di Filipo y Frank Ramírez explican que a gran escala, la ubicación del proyecto, al encontrarse en una quebrada, se percibe como una ruptura en el territorio. Sin embargo, explican que el proyecto ha logrado «suturar» esta herida, convirtiéndose en un punto de conexión que permite reunificar la ciudad.
Como moderador del conversatorio participó el arquitecto Manuel Uribe, acompañado por el crítico Ricardo Daza (Colombia), quien destacó que la ubicación del proyecto es un lugar cargado de palimpsesto de memorias y posee un fuerte vínculo con la historia de la ciudad. Sin embargo, en su intervención señaló que, “a pesar del éxito del proyecto, aún se ha dejado de lado el río que ahora fluye de forma subterránea”, recordando la importancia de integrar a la naturaleza en el diseño urbano.
PARQUE PRADO CENTRO
El proyecto Parque Prado Centro de CONNATURAL fue presentado por el arquitecto Edgar Mazo (Colombia) quien actualmente dirige Connatural Arquitectura en el Paisaje, donde se dedica a establecer relaciones armónicas y sostenibles entre los habitantes y su entorno a través de proyectos en diversas escalas.
El Parque Prado se encuentra ubicado en el barrio Aranjuez de Medellín, Colombia. Emerge como un testimonio vivo de transformación urbana sostenible. Más que una simple renovación, el proyecto destaca por su manejo innovador de escorrentías y su interpretación contemporánea de técnicas vernáculas, creando un sistema de espacios públicos que responde tanto a la topografía como a la memoria del lugar.
Al preservar elementos arquitectónicos originales y rescatar técnicas vernáculas, el parque no solo reverdece una manzana abandonada, sino que fortalece el tejido social del barrio, demostrando cómo la arquitectura consciente puede ser catalizadora de cambio comunitario.
Edgar destacó que “En El Parque Prado hubo un trabajo constante con la comunidad para poder rescatar sus riquezas y crear espacios que se sientan propios. También existía una necesidad de dar importancia a la naturaleza, por lo que se priorizó preservar las especies naturales y estimular su crecimiento”. Por tal motivo, se planteó un proceso constructivo en el cual se mantuviera parte de las preexistencias y se reutilizaron los materiales, generando nichos y fisuras entre la arquitectura permitiendo el surgimiento de la vegetación.
Moderó el conversatorio el arquitecto Marco Villegas (Ecuador) y junto al crítico Guilherme Wisnik (Brasil) se resaltó que “lo interesante de este proyecto consiste en que se trata de espacio público y no es un solo edificio u objeto, más bien, este proyecto resulta en un conjunto de varios elementos”. La Escola de Cidade (Brasil) contribuyó al debate destacando como “su arquitectura guarda el tiempo y se entrega a la transformación del paisaje”, y por parte de la Universidad Nacional Autónoma de México (México) también agregaron que este proyecto pone en evidencia el gesto de entrelazar elementos naturales con los culturales, lo cual, permite que los usuarios creen un sentido de permanencia y apropiación del lugar.
La cuarta jornada de la BAQ 2024 exploró la regeneración y transformación del espacio construido. Cada intervención demuestra cómo la arquitectura puede dar nueva vida a estructuras existentes mientras fortalece su conexión con la ciudad y sus habitantes.