La semana Bienal culminó con la charla magistral de Martino Tattara, profesor asistente de Diseño Arquitectónico en la Facultad de Arquitectura de KU Leuven. Cofundador del Estudio DOGMA, radicado en Bruselas, Bélgica. Estudio que ganó el Primer Premio Iakov Chernikhov a la mejor práctica arquitectónica emergente en 2006.
Su trabajo se destaca por relacionar la arquitectura y la ciudad, centrándose principalmente en la planificación y diseño urbano. Es por esto que su charla magistral se centró en dos proyectos que afrontan los grandes cambios tras la pandemia global.
El arquitecto empezó mencionando que “estos lugares que antes teníamos pensados para que sean cómodos y nuestros, de pronto se transformaron en lugares de producción”. Porque los nuevos espacios de producción (oficinas) pasaron a ser en los dormitorios. Y también esta mesa en la que consumíamos alimentos se ha convertido en una extensión del lugar en el que trabajamos.
En su proyecto “Living and Working” afronta la nueva idea del trabajo en todos lados, y en cómo se ha comenzado a domesticar el trabajo en la vivienda. El edificio está pensado para mostrar un tipo de arquitectura de uso múltiple, que se adapte a los usos que se le quiera dar, manteniendo una monumentalidad a través de la proporción, dimensión y utilidad.
Por otra parte, expuso que “Pak City” es un trabajo que trae a colación estos lugares descuidados por la arquitectura que no han sido contemplados antes. El proyecto está considerado a construirse en la región de Flandes, una región que es caracterizado por un proceso desenfrenado de industrialización que desencadeno una serie de conflictos sociales.
Lo que se propone es borrar estos límites entre los lotes para que estos espacios puedan ser construidos en lugares de encuentro, un lugar de actividades sociales. Con el propósito de generar el resurgimiento de lo urbano a través de tres ideas:
- Ruralización de los trabajadores
- La propiedad privada
- La protección de la familia.
Para finalizar, Tattara invitó a reflexionar sobre los modelos de construcción contemporáneos que, a través de la matriz productiva, en los últimos dos años, desde la arquitectura no reflejan los cambios que hemos vivido. Pone en consideración que esta nueva modalidad es liberadora porque es una forma de emanciparnos de las formas en las que estábamos acostumbrados a producir y a descansar.