La segunda semana de la BAQ 2020 en línea ofrecerá, al igual que en los primeros días, eventos de excelencia académica en el campo de la arquitectura, además de eventos culturales y protocolarios de gran relevancia. Durante la semana se desarrollarán 14 conversatorios, 2 entrevistas, 2 conferencias magistrales, 1 mesa redonda y eventos especiales, entre los que sobresale el veredicto y premiación del Premio BAQ Medalla de Oro, el veredicto Premio “Oscar Niemeyer” para la Arquitectura Latinoamericana, la premiación de los proyectos ganadores del Concurso Bienal y, el evento de Reconocimiento BAQ 2020 a la Trayectoria Profesional.
Durante la jornada del lunes 16 de noviembre se llevaron a cabo 4 conversatorios en los que se encontraron coincidencias respecto a la perspectiva temporal de la arquitectura y las transformaciones que se van sucediendo, como testigos de la vida y el diálogo que se desarrolla en los edificios y el entorno.
Conversatio: Ampliación Escuela Marista – Santiago y Marlon Espinoza del Estudio Espinoza Carvajal
En primer lugar los autores resaltaron la importancia de la BAQ, ya que ofrece recursos intelectuales y académicos desde una perspectiva histórica de la ciudad y la arquitectura moderna. Por otro lado, sobre este proyecto, se resaltó la importancia de la generación de espacios abiertos para que los jóvenes disfruten de ellos.
Desde el análisis profesional, el arquitecto chileno Logan Leyton expresó, al igual que otros miembros del panel, que la arquitectura de intervención conlleva la transformación. Ante la coincidencia de opiniones, resaltó la importancia de generar un análisis desde varios rincones del mundo.
Por su lado el crítico Marco Biraghi, habló sobre la arquitectura como soporte de la vida, “la obra tiene su vida, que es importante, pero la vida en la obra evidentemente es un aspecto fundamental” expresó. Señaló también que el tiempo tiene un rol fundamental en la arquitectura, que habla del espacio evidentemente, pero también es una “meditación sobre el tiempo, la arquitectura es tiempo que se ha convertido en espacio, que se cristaliza en espacio” señaló.
Conversatorio: Rijks Museum – Antonio Cruz de Cruz y Ortiz arquitectos
Sobre la obra el autor mencionó que se tomó una idea que en principio fue desechada en el proyecto original y se la llevó a cabo, entendiendo que en realidad era adecuada. “Una buena idea para un proyecto del siglo XXI es muy diferente a una del siglo XIX. El público era muy restringido a diferencia de ahora”
Sobre el mismo tema el crítico Marco Biraghi expresó que la transformación no se trata de novedad, sino de un acto que implica un pensamiento más profundo. “El tiempo puede ser un aliado o un antagonista del proyecto. La idea debe resistir a pesar de las demoras y lentitud de los procesos. este tiempo se torna en un tiempo de educación del arquitecto”. “Uno de los puntos críticos de la arquitectura actual es la reapropiación del tiempo”
Por último, desde los análisis académicos se abordó el tema del espacio y el tiempo en relación con las intervenciones en los edificios en tanto elementos urbanos y culturales. “La arquitectura puede funcionar como un contenedor de la historia de la estratificación de la memoria humana”, añadió.
Conversatorio: Palafito 7 Loft – Edward Rojas
El arquitecto Rojas explicó, durante su intervención, que una de las piezas centrales de la arquitectura de la Isla de Chiloé, son los palafitos. “Por ser este un archipiélago, tenemos respuestas arquitectónicas para la tierra, el mar y el bordemar. En el bordemar los palafitos marcan una íntima relación entre la arquitectura de la tierra y del mar”, señaló,y añadió que “La arquitectura en madera del archipiélago de Chiloé es expresión espiritual, material y tecnológica de la memoria histórica y cultural de sus habitantes y navegantes”
El análisis de la obra se llevó a cabo desde un equipo de profesionales, representados por Karla Espinoza y Ámbar Solórzano, quienes se refirieron al proyecto como un reflejo de tradiciòn y cultura desde la relación del ser humano con el entorno natural. Finalmente, la arquitecta Berta Bardí I Milà estableció su punto de vista crítico con la idea de que la humanidad es parte de una cadena de proyectos, que recurren a la ancestralidad en obras actuales, adaptándolas a los condicionantes de uso, entorno y materiales.
Conversatorio: Intervención en Campus Central de la Universidad de Cuenca – Javier Durán.
El proyecto se llevó a cabo sobre la premisa de que se debía brindar al usuario un espacio que cambie el protagonismo del auto a los peatones. “Pensamos un lugar que comunique la ciudad con el resto de espacios. Transformarlo en un espacio verde que se pueda utilizar. La consigna más importante para nosotros es integrar el proyecto con la ciudad”, señaló Durán.
Por su lado, Ingrid Quintana, arquitecta colombiana, estableció la relevancia de los espacios físicos en la vida ciudadana y universitaria. “Reconocer esa relevancia es el principal atributo del Campus Central de la Universidad de Cuenca”. Dijo también, que el proyecto es una experiencia que puede servir como modelo de gestión del territorio, tomando en cuenta que “el ejercicio contemporáneo de la arquitectura va mucho más allá de la materialización de habitáculos de concreto, metal y ladrillo”, según la arquitecta.
Desde la Universidad Nacional Autónoma de México los estudiantes Karen Álvarez y Andrés Colorado presentaron su análisis sobre ciudad y transformación, como dos elementos simbióticos. Sobre el proyecto expresaron que “es importante generar un diálogo entre elementos culturales, políticos y sociales en las ciudades universitarias en América Latina”. Por su lado, Erika Carvajay y Edison Mayorga de Car- ma Estudio 7 posicionaron la idea de la reconfiguración del espacio público y privado en el proyecto, que se complementan en la misma intervención y permiten una visión más colectiva que abre espacios para el disfrute y la oportunidad de que las actividades del campus se generen de forma más abierta.